domingo, 15 de abril de 2007

OPUS 4



Camino lentamente hacia la albura


hacia una guarida inmaculada


Lechuzas, ojos en tinieblas


centinelas de un paraíso virgen


Tesoro escondido


Tesoro florido


Voy a desvahar aquella flor marchita


con un influjo de vida eterna


Aquel umbral carmesí


por fin será vencido


Aquel santuario vedado


que celaste cautelosamente


será presa de natura


y reverdecerá lleno de locura.


Profanar aquel triste legado


es mi mayor deseo


Cambiar, reaccionar, flotar


Desatar uno a uno los botones de tu alma


libertad, naturaleza devoradora


tus raíces serán mis venas


como enredaderas un gemido exhalara


anunciando la llegada de un nuevo huésped


que morara de aquí a la eternidad.




No hay comentarios: